Bay Levy nació el 14 de junio de 1976 en un pequeño pueblo de Nicaragua. Creció en medio de la pobreza y la agitación de la guerra civil de los años 80, enfrentando numerosos desafíos durante su infancia. A pesar de las adversidades, Bay recuerda su niñez como hermosa, marcada por una profunda conexión con sus raíces y una resiliencia notable. A los 12 años, descubrió el poder de la música, aprendiendo a tocar la guitarra y luego dominando otros tres instrumentos. La música se convirtió en un refugio en su vida, ayudándolo a escapar de las duras realidades que enfrentaba su país.
A los 16 años, Bay se trasladó a Costa Rica, una decisión que transformaría su vida para siempre. Joven, ingenuo y ansioso por nuevas experiencias, tuvo que adaptarse rápidamente para sobrevivir y prosperar. Trabajó en granjas y supermercados, lo que no solo le brindó una comprensión más profunda de la naturaleza, sino que también le enseñó valiosas habilidades en el manejo de personas. A pesar de las dificultades, que incluían dormir en un colchón delgado con solo unas mantas durante años, el arduo trabajo de Bay dio sus frutos cuando pudo comprarse su primera bicicleta. Este logro le enseñó el valor de la autosuficiencia y la libertad.
En 1999, el viaje de Bay lo llevó a los Estados Unidos, atravesando Centroamérica y México antes de llegar finalmente en febrero del año 2000. Durante sus primeros años en EEUU., se dedicó a la música, colaborando con iglesias y soñando con una exitosa carrera musical. Sin embargo, la vida tomó un giro inesperado. Después de un año, Bay se aventuró en el mundo empresarial, marcando el comienzo de una nueva etapa.
Su primera experiencia en los negocios fue desafiante. La compra de su primera empresa, sin experiencia previa, resultó ser una pesadilla. No obstante, este revés no lo detuvo; en cambio, avivó su determinación. Pasó tres años en la industria de la pintura antes de abrir su propia empresa de pintura, que creció de manera constante hasta que la crisis económica de 2008 lo obligó a tomar decisiones difíciles. Años después, Bay lanzó una nueva empresa de construcción, Habitation Group, que continúa prosperando hasta el día de hoy.
En 2017, abrumado por el estrés de gestionar a más de 30 empleados y las responsabilidades hacia sus clientes, Bay tomó la difícil decisión de cerrar Habitation Group. La presión era inmensa, y por su salud, tuvo que despedir a todo su equipo. Tras un breve período trabajando para otra empresa, decidió reabrir Habitation Group. Hoy en día, la compañía genera más de 2.5 millones de dólares en ventas anuales, un testimonio de su perseverancia, adaptabilidad y visión.
Habitation Group se ha convertido en uno de los mayores logros de Bay. Desde pequeños proyectos de 5,000 dólares hasta ventas multimillonarias, el éxito de la empresa simboliza su viaje, desde la dificultad hasta el triunfo. Actualmente, Bay está comprometido a inspirar a otros a perseguir sus sueños, dedicándose a ayudar a los emprendedores a hacer crecer sus negocios y alcanzar sus metas. Él cree firmemente que si un joven que creció en la pobreza puede convertirse en un empresario exitoso, cualquiera puede lograrlo.
Además de sus emprendimientos comerciales, Bay es autor de los libros “Minister or Free Loaders” y su nuevo título “Keep The Movement”, con la intención de ayudar a los demás. A través de sus escritos, busca llegar a la mayor cantidad de personas posible, demostrando que el éxito es alcanzable, sin importar el punto de partida.
La historia de Bay Levy es un relato de resiliencia, transformación y la inquebrantable creencia de que el éxito es posible, sin importar de dónde se comience.